Cuestionan versión policiaca de muerte de normalista de Mactumatzá
Jesús Alaín, normalista de Mactumatzá, murió al caer de una camioneta durante una persecución. Sus compañeros insisten en que fue homicidio.
El día de ayer tuvo lugar una marcha silenciosa en Tuxtla Gutiérrez. Cientos de estudiantes normalistas marcharon desde el puente Bicentenario hasta el Parque Central de la ciudad para exigir justicia para el normalista de la Escuela Rural Normal ‘Mactumatzá’ , Jesús Alaín Vázquez Pérez, quien murió el jueves pasado en circunstancias todavía no muy claras.
Jesús Alaín tenía 22 años y cursaba el último semestre en la normal. Murió durante una persecución. Lo perseguían, a él y a otros 10 compañeros de la normal, dos vehículos de la nueva policía “Pakal” de la Secretaría de Seguridad del Estado de Chiapas. De acuerdo a un video que ha hecho público la misma secretaría, Jesús cayó de la batea de una camioneta en movimiento, perdiendo la vida.
La persecución había iniciado horas antes. Alrededor de las cinco de la tarde, un grupo de normalistas había bloqueado el paso a un camión comercial en la Calzada del Sumidero.
La policía del estado logró frustrar el robo y fue allí que comenzó la persecución, la batalla. De acuerdo a la versión de Óscar Aparicio Avendaño, secretario de Seguridad, antes de huir, un grupo de 11 normalistas retuvo a un par de agentes de la Secretaría de Seguridad del Pueblo (SSP), destrozó una patrulla a pedradas y robó otra.
“Tenemos este video donde se puede observar que van estas personas tratando de huir de la policía. Llevan ya a los dos compañeros privados de la libertad, y se observa cómo uno de los sujetos (Jesús) se cae. Inclusive la camioneta (de la policía) que venía atrás, evade a esta persona. No hubo nunca uso de la fuerza, fue un accidente provocado por la irresponsabilidad de estas mismas personas”.
ÓSCAR APARICIO AVENDAÑO, secretario de seguridad

A los policías estatales secuestrados los habrían despojado de sus armas y trasladado a las instalaciones de la Normal Rural Mactumatzá; fueron liberados a los pocos minutos de llegar aunque sus armas continúan bajo resguardo en el plantel. Todo esto de acuerdo a la versión de las autoridades.
El normalista de lesionado fue trasladado a un hospital pero se confirmó su fallecimiento al poco tiempo.
Existen, sin embargo, otras versiones de los hechos. El viernes pasado, después de la muerte de Jesús Alaín Vázquez, estudiantes de Mactumatzá marcharon para exigir castigo contra los policías a quienes señalaron de ser responsables de la muerte de su compañero normalista.
“No nos vamos a quedar sentados a esperar, queremos ver tras las rejas a los responsables”, dijeron en un mitin celebrado en la plaza central de la capital chiapaneca.
Según la versión de los estudiantes, Jesús Alaín habría sido herido en la cabeza ya sea por el impacto de una lata de gas lacrimógeno o de algún otro proyectil.

Filiberto Velázquez Florencia, presidente del Centro de Derechos Humanos Minerva Bello, aseguró los 11 normalistas se dirigían al plantel cuando fueron perseguidos por dos patrullas que se desplazaban a alta velocidad, una de las cuales varias veces intentó provocar que los estudiantes chocaran. Además de eso, hay vario testimonios de estudiantes que escucharon detonaciones y al menos uno que presentó heridas por algún tipo de proyectil.
“Hay al menos un testimonio de un estudiante de que fue impactado en su hombro izquierdo. Desconocemos qué tipo de proyectil utilizaron, pero perforó su playera y tiene el golpe en el hombro. Pudo haber sido cualquier objeto. El área en la que fue la persecución está llena de casquillos de diferentes municiones. Otros testimonios aseguran que escucharon detonaciones. Por eso nuestra teoría es que algo les golpeó y por eso cayó el muchacho, porque cayó desvanecido”.
fILIBERTO VELÁZQUEZ, PRESIDENTE DEL CENTRO DE DERECHOS HUMANOS “MINERVA BELLO”
Jesús era originario de Frontera Comalapa. Estudiaba el octavo semestre. Sus compañeros refieren que era el mejor jugador de baloncesto de la escuela, además de un normalista comprometido con Mactumatzá y su causa que, tan sólo durante 2025, había mantenido una agenda activa de protestas. Ya sea por la liberación de estudiantes detenidos, mejoras en las instalaciones de la escuela, revisión de las políticas laborales en torno a la educación o por condiciones básicas para su formación en la normal, los estudiantes de Mactumatzá se caracterizan por su presencia en calle: marchando o tomando casetas, secuestrando camiones.
Jesús Alaín estaba a punto de graduarse. Este sábado, durante una velada en su honor, se colocó un altar con su fotografía en el parque central; su nombre fue escrito con flores y veladoras. Allí, los estudiantes de la Normal Rural de Mactumatzá insistieron en que su muerte no es un accidente, como insisten las autoridades locales, sino un eslabón más de la violencia institucional y el olvido que la Normal de Mactumatzá vive desde hace décadas.
El padre de Jesús Alaín, Jesús Lenin Vázquez Santizo, hizo esta mañana un llamado público a la normal para que evite que sus alumnos se involucren en manifestaciones, acciones o bloqueos que puedan terminar en conflictos con las fuerzas públicas. Pidió a la institución escolar y a su comité que no expongan a otros estudiantes a situaciones de riesgo.