Detienen a Tyler Robinson, presunto asesino del influencer de derecha Charlie Kirk
Tyler Robinson, de 22 años, fue entregado por su propia familia, a la que habría sugerido su participación en el crimen contra Kirk.
Originario de Utah, blanco, de 22 años, donante de la campaña de Donald Trump, hijo de un exsheriff de policía y de la cultura de armas que el año pasado dejó más de 15 mil muertos en Estados Unidos, así describen a Tyler Robbinson, sospechoso bajo custodia por el homicidio del conferencista conservador Charlie Kirk, asesinado de un tiro en el cuello el miércoles pasado.
El Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) identificó a Tyler Robinson como el presunto asesino de Kirk, alcanzado por un disparo cuando participaba en un debate en la Universidad del Valle de Utah, irónicamente mientras hablaba de la violencia con armas de fuego.

Kirk, conferencista y fundador de la organización Turning Point USA tenía 33 años. Sus posturas contra la migración, contra los derechos reproductivos de las mujeres, el negacionismo del Covid-19 y su reciente respaldo a Israel en el genocidio lo volvieron una figura de peso entre la opinocracia conservadora.
Por la mañana, el presidente Donald Trump confirmó la detención en una entrevista con la cadena televisiva FOX News: “Lo tenemos bajo custodia”, dijo el mandatario, quien fue respaldado por Kirk durante sus periodos de campaña presidencial. “Era como un hijo”, dijo el presidente acerca de Kirk.
De acuerdo con el gobernador de Utah, Spencer Cox, el joven de 22 años habría sido entregado por sus familiares, a quienes dio indicios de haber cometido el crimen, indagado por las autoridades estadunidenses como un asesinato político. Hasta ayer, se contaban con algunas imágenes de cámaras de seguridad, con el rifle de cerrojo utilizado presuntamente por Robinson y municiones con supuestos grabados antifascistas.

En su turno, el director del FBI, Kash Patel, reconoció la velocidad con que su oficina atrapó al sospechoso “menos de 33 horas para ser exactos” y compartió detalles como la recopilación de 11 mil evidencias, pese a que inicialmente se capturó e interrogó a un sospechoso que no tenía nada que ver con el crimen.