Cozumel: empresa desmonta selva virgen con permiso en vilo
Una empresa emprendió el desmonte de la selva en Cozumel al amparo de un permiso de la pasada administración. Semarnat revisa el caso.
La empresa Muelles del Caribe S.A. de C.V. inició el desmonte de 1.1 hectáreas de selva virgen en la isla de Cozumel, aprovechando un permiso de cambio de uso de suelo otorgado durante la anterior administración municipal y que vence a finales de septiembre. La acción se ejecuta mientras la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) analiza el impacto ambiental del proyecto del Cuarto Muelle, vinculado al mismo predio.
Integrantes de la asociación civil Conservación, Investigación y Manejo Ambiental de Cozumel (CIMAC) documentaron desde el 1 de septiembre la deforestación gradual del terreno, ubicado en la prolongación de la carretera Costera Sur. Mediante videos aéreos y fotografías, evidenciaron la tala de vegetación y la alteración del hábitat de especies de fauna silvestre.
Noemí Guadalupe Martín, presidenta de CIMAC, denunció que la empresa aceleró los trabajos para hacer válido el permiso antes de su vencimiento y comenzar el desmonte de la selva en Cozumel. “Logran un permiso de cambio de uso de suelo para deforestación del área. Ese permiso se vence a finales de septiembre y lo que hicieron fue ejecutarlo”, afirmó en entrevista.
El permiso, una “autorización de cambio de uso de suelo en terrenos forestales”, fue otorgado durante la administración de la entonces alcaldesa morenista Juanita Obdulia Alonso Marrufo (2021-2024). El oficio Nº 03/ARRN/1298/2022, con sello de recibido de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) del 21 de septiembre de 2022, autoriza el desarrollo del proyecto “Muelle Cozumel, Terminal de Cruceros”.
El documento, difundido originalmente por Animal Político, concede a la concesionaria un plazo de un año para realizar el desmonte de vegetación forestal en Cozumel, prorrogable bajo lo establecido en la ley. El cambio de uso permitido transforma el suelo forestal en suelo urbano categorizado como “Zona turística densidad media”.
Los usos autorizados para el predio con clave catastral 4011800151, denominado “California”, incluyen: habitacional residencial turística, pequeño y mediano comercio con un área máxima de ventas de 4500 m2, hoteles, estacionamientos y usos recreativos, culturales y administrativos.
Pese a que la empresa comunicó la suspensión temporal de la construcción del Cuarto Muelle, días después inició el desmonte para la plaza comercial. “¿Por qué cortar árboles y plantas vírgenes que son tan importantes para el oxígeno, el medio ambiente y el arrecife?”, cuestiona Guadalupe Martín.
Ante la denuncia pública, Óscar Rébora, secretario de Ecología y Medio Ambiente de Quintana Roo, acudió a Cozumel y clausuró el predio debido a la falta de un permiso para manejo de residuos. Esta acción, según Martín, dio “un respiro” para detener temporalmente la tala.
El permiso municipal especifica que la deforestación debía realizarse por medios mecánicos y manuales, sin químicos ni fuego, y de forma gradual para evitar erosión. Además, identificó la presencia de la palma chit (Thrinax radiata), especie catalogada como Amenazada en la NOM-059-SEMARNAT-2010, para cuya remoción se exigió retiro y reubicación.
Para la fauna, el resolutivo obliga a la empresa a implementar un “Programa de rescate y reubicación de especies”, con especial énfasis en la boa (Boa constrictor), la paloma blanca (Patagioenas leucocephala), la lagartija espinosa (Sceloporus cozumelae) y el charrán mínimo (Sterna antillrum). CIMAC asegura que no se ejecutó dicho rescate, solo el ahuyentamiento de los animales.
El 12 de junio, CIMAC interpuso un recurso de revisión ante la Semarnat sobre los permisos del Cuarto Muelle. La dependencia federal admitió la solicitud el 18 de junio y anunció que revisaría el proyecto en materia de impacto ambiental. No obstante, este proceso no detuvo los trabajos de desmonte en el predio comercial aledaño.
“Aplicaron su poder económico y les valió la vida de la flora y fauna de Cozumel”, manifestó la presidenta de CIMAC. El caso enfrenta ahora la revisión de la Semarnat y la clausura temporal estatal, en un conflicto que pone en evidencia las tensiones entre el desarrollo turístico y la conservación ambiental en la isla.