Trump: habrá un ‘baño de sangre’ si no gano, los migrantes ‘no son personas’
La violencia y el acoso a migrantes se hicieron presentes en el primer discurso de Donald Trump como virtual candidato republicano a la presidencia.
El primer discurso de Donald Trump como virtual candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos causó revuelo por la advertencia de que habría habrá “baño de sangre” de no ser él el próximo mandatario. Sobre que los migrantes en situación irregular, aseguró que “no son personas”, lo cual motivó que sus compañeros de partido de apresuraran a matizar las declaraciones del magnate.
El expresidente estadounidense habló este sábado en un mitin en Ohio, en el que acusó que hay un plan de China para fabricar vehículos en México y venderlos en Estados Unidos. Esto fue lo que motivó su abrupta amenaza.
“No podrán vender esos automóviles si soy elegido” y prosiguió: “Ahora, si no soy elegido, será un baño de sangre para todo el mundo, eso será lo de menos, será un baño de sangre para el país. Eso será lo de menos, pero ellos no van a vender esos autos”, advirtió sin especificar más.
Las palabras fueron leídas como una advertencia ante un resultado adverso en la segunda elección frente al demócrata Joe Biden, ante con quien perdió en 2020, en una apretada elección en la que Trump acusó fraude, sin poderlo comprobar.
“Quiere otro 6 de enero, pero el pueblo estadounidense le va a dar otra derrota electoral este noviembre porque continúa rechazando su extremismo, su fijación por la violencia y su sed de venganza”, dijo la campaña de Joe Biden en un comunicado, en clara referencia a la toma del Capitolio en 2021, el cual dejó cinco personas muertas.

Este mismo señalamiento obligó a sus compañeros de partido a matizar. El senador republicano Bill Cassidy dijo que los medios de comunicación sacaron de contexto la declaración y explicó a NBC que el magnate se refería a “un baño de sangre económico, no a violencia en las calles”; por su parte el también senador Mike Rounds dijo a CNN que Trump se refería a la “crisis económica” del sector automotriz.
El discurso del magnate estadounidense también estuvo cargado en contra de las personas migrantes, algo que hizo desde su campaña en 2016, lo cual le ha valido el apoyo de sectores de ultraderecha, entre ellos grupos supremacistas.
Acusó a Biden de haber “apuñalado por la espalda repetidamente” a los votantes afroestadounidenses por los permisos de trabajo que se han otorgado a “millones” de personas migrantes, que han llegado a ese país en niveles récord en los últimos años; también de haber endurecido el discurso de Biden, quien en semanas pasadas prometió cerrar la frontera si se aprobaba un paquete de apoyo económico para Ucrania, lo que al final fue rechazado por los legisladores estadounidenses.
“No sé si le llamaría personas (a los migrantes) (…) En algunos casos no son personas. Es mi opinión. Pero no se me permite decir eso porque la izquierda radical afirma que es terrible decir algo así“, dijo en lo que parece un adelanto de la repetición de su campaña anterior en la que acusó que las personas migrantes eran “violadores” y “asesinos”.