Los resultados de los Cómputos Distritales Judiciales 2025 del INE muestran ya a Hugo Aguilar Ortiz como el virtual ganador de la elección para presidir la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Se trata de un perfil controversial, ambivalente. Si bien entre sus compromisos de campaña se encuentra el impulso de la justicia ambiental y el de los derechos de las comunidades indígenas, su labor durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador como mano derecha de Adolfo Regino, titular del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI), fue cuestionada en distintos momentos por privilegiar los intereses del Estado por encima de los procesos comunitarios y del medio ambiente.
Aguilar Ortiz fue el responsable de coordinar las consultas entre las comunidades indígenas para avalar los megaproyectos prioritarios del sexenio: el Tren Maya y el Corredor Interoceánico, por ejemplo.
Estas consultas fueron señaladas, incluso por la misma ONU-DH, por diversas irregularidades y por incumplir estándares internacionales. Por ejemplo, muchas de ellas fueron realizadas a mano alzada, en asambleas simuladas, en donde participó gente que no vivía en las comunidades y en cuyas actas de registro figuran personas muertas o firmas falsas.

Además, muchas de estas consultas eran realizadas sin que las comunidades fueran debidamente informadas de los efectos nocivos de los proyectos a nivel ambiental o social. El caso del Tren Maya es el más emblemático,pues las consultas se hicieron sin presentar los estudios de impacto ambiental. Alicia Bárcena, actual secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales, ha reconocido que ese proyecto implicó un severo daño ambiental en la zona.
Esta cercanía con Morena y el proyecto obradorista fue clara cuando, el pasado 22 de febrero, la presidenta Claudia Sheinbaum expresó: “Queremos que un indígena llegue a la Suprema Corte de Justicia de la Nación”. Aguilar fue el único aspirante indígena en participar en la contienda.
De origen ayuujk, nacido en Villa de Guadalupe, municipio de San Miguel El Grande, distrito de Tlaxiaco, en la región Mixteca de Oaxaca, Hugo Aguilar Ortiz –según su propia biografía– decidió estudiar leyes cuando supo que existía una alta cantidad de presos indígenas que no podían defenderse debido a que no hablaban español.
Se licenció en Derecho por la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO), universidad donde también realizó su maestría, aunque no ha terminado de titularse.
Con más de 30 años de trayectoria en el ámbito jurídico, sus cercanos lo describen como un abogado brillante y audaz que comenzó trabajando en la delegación de la Procuraduría de Defensa Indígena en Tlaxiaco.
Su carrera como activista inició en 1993, como uno de los fundadores de la asociación civil Servicio del Pueblo Mixe (SERmixe), dedicada a asesorar, capacitar, promover y defender derechos indígenas del pueblo Ayuuk.
Aunque algunos medios han publicado que Aguilar participó como asesor del Ejército Zapatista de Liberación Nacional durante la firma de los acuerdos de San Andrés, lo cierto es que él no participó personalmente en ese evento. La organización SERmixe envió como su representante a Adelfo Regino, en lugar de Floriberto Díaz, quien no asistió por estar enfermo.
Aún más, aunque Hugo Aguilar fue integrante del Congreso Nacional Indígena como parte del área jurídica de SERmixe, el EZLN lo desconoció hace más de una década por su cercanía con Adelfo Regino, el titular del INPI. Aguilar fue invitado personalmente por Regino a esta institución como coordinador del Consejo Nacional de Pueblos Indígenas.
Además de su trabajo en el INPI, Hugo Aguilar ha sido asesor y representante legal de diversas comunidades indígenas oaxaqueñas que enfrentan conflictos agrarios o jurídicos.
Entre las más relevantes se encuentra su representación en 2006 en seis controversias constitucionales contra la Ley de Radio y Televisión con la cual se buscaba limitar que las comunidades indígenas manejaran sus propios medios de comunicación.
Otra de las polémicas que existen en torno a él es el papel que desempeñó en la denuncia pública hecha por la también abogada y activista ayuujk Sandra Domínguez en contra de varios funcionarios públicos de Oaxaca involucrados en la difusión de imágenes pornográficas de mujeres indígenas en la sierra mixe.
De acuerdo con Joaquín Galván, uno de los activistas de la región mixe que acompañó a la abogada Sandra Domínguez, desaparecida y asesinada hace unos meses, el equipo jurídico encabezado por Hugo Aguilar en el INPI envió a uno de los abogados a intentar comprar el silencio de Domínguez en este tema.
Según los cómputos oficiales, Hugo Aguilar tiene 6 millones 77 mil votos con prácticamente la totalidad de las actas contabilizadas, la votación más alta de todas las candidatas y candidatos a ser ministros de la Suprems Corte.
Su ventaja ha sorprendido debido a que, a diferencia de Lenia Batres y Yasmín Esquivel, su nombre no figuraba hasta hace poco en los grandes medios de comunicación. Su campaña se enfocó principalmente en redes sociales como Facebook, TikTok e Instagram, donde apelaba a su identidad indígena como base de su propuesta política.
Sin embargo, junto a las mismas Batres y Esquivel, Aguilar fue uno de los principales beneficiados por los ”acordeones“, los instructivos repartidos de manera masiva entre las bases de Morena para encauzar los votos hacia los candidatos más cercanos al partido.
Entre sus propuestas destacan el impulso de una función jurisdiccional en territorio, incorporando visitas in situ a comunidades, con diálogo con las personas afectadas y eliminar los formalismos excesivos. Además, buscará “evitar que la función jurisdiccional sea un obstáculo para el cambio social”, impulsando el diálogo entre los distintos poderes, así como fortalecer enfoques multidisciplinarios e intervención de instancias especializadas, para fortalecer la figura de Amicus Curiae.
A la medianoche de este martes, con el 99% de los votos computados, Hugo Aguilar encabezaba los Cómputos Distritales Judiciales, aventajando a Lenia Batres Guadarrama por más de 233 mil votos.