Ayotzinapa al final del sexenio: decepción, maltratos y nuevas detenciones
Tres nuevas detenciones prometen nueva información sobre el caso Ayotzinapa justo al fin del sexenio y a 10 años de la Noche de Iguala.
Faltan pocas semanas para que se produzca el final de sexenio y la desaparición de 43 estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa cumpla una década. Suspendidas en un duelo marcado por la impunidad de funcionarios y autoridades, la opacidad en torno a documentos que involucran a militares y el desconocimiento del paradero de los muchachos, las familias enfrentan la decepción del final del sexenio.
Este martes 27 de agosto padres y madres de los normalistas desaparecidos sostuvieron la última reunión con el presidente Andrés Manuel López Obrador antes de que éste dé por concluido su gobierno. Fue un encuentro amargo.
El principal abogado y representante legal del caso, Vidulfo Rosales, de la organización civil Centro para los Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan, advirtió antes del encuentro que, en caso no tener ninguna actualización ese día, sería el fin del diálogo entre las familias y el presidente. Así fue.
“La posición de los padres es que esta es la última reunión”, declaró el abogado al reportero Juan Luis Altamirano de El Sur de Guerrero. “En la última recta de este gobierno hubo maltrato, estuvimos aquí plantados para un diálogo, fluyó el diálogo pero fue un diálogo tenso, con muchas fricciones. No terminamos bien con este gobierno. Terminamos mal”.
Esta misma semana, Fábrica de Periodismo reveló las respuestas que Tomás Zerón, y ex titular de la Agencia de Investigación Criminal de la entonces Procuraduría General de la República, entregó a Alejandro Encinas sobre el caso.
Zerón actualmente se se refugia en Israel en calidad de prófugo de la justicia mexicana, quien lo busca por participar en las torturas a varios de los implicados en el caso Ayotzinapa y por desaparición forzada, al participar en la manufactura de la “Verdad Histórica” con la cual se quiso dar carpetazo al caso en la pasada administración.
Desde su autoexilio, Zerón señaló que distintos funcionarios de alto nivel, entre ellos el entonces presidente Enrique Peña Nieto y su secretario de Defensa,Salvador Cienfuegos, y su secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, participaron en la confección de la versión oficial del caso, con la cual se quiso garantizar impunidad para varios de los responsables.
“Me parece muy truculento”, dijo el presidente hace unos días, a punto de acabar su sexenio, restándole importancia a los señalamientos del exfuncionario sobre el caso Ayotzinapa

Tres nuevos detenidos
Durante esa última reunión, sin embargo, el gobierno informó sobre la detención de tres presuntos implicados que podrían aportar más información sobre lo ocurrido con los estudiantes hace ya casi 10 años.
Marco Antonio N “La Pompi” fue detenido, pocas semanas después de los hechos. En sus primeras declaraciones confesó que él había sido uno de los responsables de ejecutar a nueve normalistas. Esta confesión, sin embargo, fue obtenida bajo tortura y esa es una de las razones por las cuales fue liberado luego de pagar 10 mil pesos. Hoy está claro, gracias a la información derivada de años de investigaciones, que “La Pompi” atestiguó, por lo menos, una parte de la ruta que siguieron los estudiantes hacia su desaparición o incluso la ejecución de algunos de esto.
“Esperamos que esa detención pueda detonar algunos hilos en la investigación” expresó Vidulfo Rosales. “Es una persona muy importante que puede, si se le jala ese hilo de la investigación, puede llevarnos a mayores datos”.
El segundo detenido es Hugo C: un policía de Huitzuco que participó en el ataque de Iguala y en el traslado de los estudiantes hacia un paradero todavía desconocido.
El tercero es Erick Román Fernández, El Ranchero, un ganadero de la comunidad de Apetlanca, lugar donde algunos de los presuntos perpetradores –Jonathan Osorio, Patrio Reyes y Darío Morales– fueron detenidos hace años y en donde dos implicados refirieron a la Comisión de Acceso a la Verdad y la Justicia (Covaj) para el Caso Ayotzinapa que algunos de los muchachos fueron llevados.
El Ranchero es mencionado en el Tercer informe del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) que empujó la investigación del caso Ayotzinapa desde el sexenio de Enrique Peña Nieto y durante algunos años de la actual administración. Un testigo protegido señaló a Román Fernández como uno de los segundos al mando del grupo criminal Guerreros Unidos, el principal involucrado en la desaparición de los estudiantes junto a autoridades de distintas esferas. Su nombre también aparece en distintos reportes del Ejército y denuncias anónimas que lo ubican como una de los personajes que participaron en el traslado de los normalistas después de la noche del 26 de septiembre de 2014.
El cansancio y el maltrato
Todo esto sucede al final de sexenio de Andrés Manuel López Obrador (AMLO), en un momento de transición en donde las madres y padres de los 43 de Ayotzinapa exigen un cambio en el manejo del caso por parte de Claudia Sheinbaum, la sucesora de AMLO en la silla presidencial. Sobre todo, en lo que refiere a la participación del Ejército en los crímenes cometidos.

Diez años de marchar y exigir no son poca cosa. Las familias arrastran cansancio, tensión, sus defensores han sido espiados con Pegasus y en más de una ocasión se han enfrentado con corporaciones armadas y campañas negras. También divisiones internas e intentos de coptar o fragmentar el grupo. Hace unos días, Felipe de la Cruz, anunció que él y un grupo de padres de familia habían decidido romper con el movimiento.
Felipe De la Cruz, sin embargo, no es padre de ningún muchacho desaparecido. Su hijo, Ángel Neri de la Cruz, sobrevivió al ataque de Iguala. Durante un tiempo, sin embargo, Felipe se auto-designó vocero de las familias hasta que en 2021 se nominó como diputado federal de Morena lo cual le mereció el veto de cualquier actividad relacionada con Ayotzinapa y hace poco encabezó una marcha de apoyo al ex-alcalde José Luis Abarca, uno de los responsables de lo ocurrido en 2014.