El gobierno elimina a 20,000 desaparecidos del censo nacional; “sólo” reconoce a 100,000
El gobierno de Andrés Manuel López Obrador actualizó nuevamente el censo de personas desaparecidas y no localizadas: reconoce 99,729 personas en esa condición. Este número contrasta con las casi 115,000 que reporta el registro nacional, cuyo proceso de depuración ha sido criticado por su falta de rigor y ha sido percibido como un intento de manipular las cifra de cara al cierre del actual sexenio.
La secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde, presentó este martes en Palacio Nacional un nuevo informe sobre la depuración que han hecho al registro oficial que guarda datos de personas desaparecidas desde mediados del siglo pasado. Mientras la información del censo era presentada, la fundadora del colectivo Madres Buscadoras de Sonora, Ceci Flores, exigía afuera del recinto ser recibida por López Obrador para entregarle la pala con la que busca a sus dos hijos, para de manera simbólica darle el “mando” para que se haga cargo de los desaparecidos. Sin embargo, no logró ser recibida.
Según los datos presentados, 20,193 personas han sido localizadas desde diciembre pasado, cuando se presentó el primer informe de la actualización del censo de desaparecidos que ordenó el gobierno de López Obrador el año pasado . Esta acción derivó en la salida de la titular Karla Quintana de la Comisión Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas en agosto de 2023.
En el seminario Violencia y Paz del Colegio de México (Colmex), la abogada sostuvo que se opuso a la revisión del registro porque lo entregaron a la Secretaría del Bienestar y no a expertos, con el fin de que se redujera la cifra.
“Es clara la intención de este (nuevo) censo, que es el reducir los reportes de desaparición, principalmente en este sexenio. Si no se hace cuidadosamente (…) con un análisis detallado de la información, se corre el riesgo de que se den de baja personas que sigan desaparecidas, solamente con un indicio de localización”, explicó la abogada en el evento realizado en noviembre pasado.

Tras su salida, el presidente Andrés Manuel López Obrador acusó que había “mala fe” en el trabajo de la exfuncionaria. “Nadie está en contra de que haya una actualización de un registro, lo que queremos tener es el mejor registro posible para tener mayores posibilidades de encontrar a alguien, sea mayor o menor el número. El problema es que se está realizando en términos de forma. Es que no se está llevando a cabo por las autoridades especializadas, coordinado por ellas”, abundó Karla Quintana en aquella ocasión.
De acuerdo con Luisa María Alcalde, 4,656 personas fueron halladas en visitas casa por casa, 4,629 por informes de defunción, 10,717 por autoridad local y 191 en centros penitenciarios.
“De las personas localizadas, el 86% no fue víctima de delito, principalmente fueron localizados en su domicilio o en algún domicilio alterno; el 3% está relacionado con delitos previstos en la Ley General en Materia de Desaparición Forzada de Personas y Desaparición Cometida por Particulares; y el 10% fue víctima de algún otro tipo de delito, principalmente se trata de violencia familiar, tratándose de violencia familiar, que sí existe un delito y que por eso ese motivo es la ausencia”, explicó Alcalde.
Investigaciones periodísticas han documentado que el censo ordenado por López Obrador da por halladas a decenas de personas que aún no son localizadas. Una reciente investigación de Quinto Elemento Lab y A dónde van los desaparecidos permitió descubrir que al menos 30 personas figuran en la lista de localizados, pero sus familias niegan que hayan sido encontradas. Además existen casos de personas que fueron “borradas” del registro nacional.
Familiares de personas desaparecidas han entablado una batalla legal para evitar que su ser querido sea borrado del registro oficial. A inicios de marzo, la representante del colectivo de búsqueda de desaparecidos 10 de marzo, Delia Quiroa, informó que un juez le concedió una suspensión que obliga al gobierno mexicano a no “modificar o suprimir” el registro nacional de personas desaparecidas y no localizadas.