Congreso de la CDMX aprueba la Ley Paola Buenrostro, que tipifica el delito de transfeminicidio
El Congreso de la Ciudad de México (CDMX) aprobó la llamada Ley Paola Buenrostro, para tipificar el transfeminicidio como un delito con penas de hasta 70 años de cárcel. La capital del país es la segunda entidad que avala esta reforma, la primera fue Nayarit.
La reforma implica cambios al Código Penal y Civil local, así como a la Ley Orgánica de la Fiscalía General de Justicia y a la Ley de Víctimas locales. Fue aprobada con 45 votos a favor y uno en contra, el de la panista América Rangel.
La reforma especifica que comete el delito de transfeminicidio quien, por razón de identidad de género o expresión de género, prive de la vida a una mujer trans o a una persona cuya identidad o expresión de género, real o percibida, se encuentre dentro del espectro femenino de género. Quien lo cometa será castigado con una pena de prisión de 30 a 70 años de cárcel.
La reforma también indica que si el cuerpo de la víctima no es reclamado por sus familiares o si estos pueden vulnerar su identidad o expresión de género o su dignidad, debe ser entregado a su familia social. Lo mismo para el trámite del acta de defunción.
La familia social, detalla, son las personas que pertenecen al círculo más cercano de la víctima, como amistades, compañeros o de trabajo o de vivienda o cualquier otra que tenga una relación estrecha y reconocida.
La Ley Paola Buenrostro también ordena a la Fiscalía General de Justicia de la CDMX generar datos estadísticos e informes trimestrales sobre los delitos que se cometan contra la comunidad LGBT+.
La iniciativa lleva el nombre de Paola Buenrostro, mujer trans asesinada en 2016 en calles de la Ciudad de México y a quien se reconoció como la primera víctima oficial de transfeminicidio del país. Por su asesinato, la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México ofreció disculpas públicas ante la impunidad y la falta de perspectiva de género para llevar el caso.

La reforma fue liderada por la Casa de las Muñecas Tiresias, asociación civil creada por Kenya Cuevas, amiga de Paola Buenrostro, para exigir justicia por el crimen. El presunto responsable, el exmilitar Arturo Felipe Delgadillo Olvera, sigue siendo buscado y se ofrece una recompensa vigente de medio millón de pesos.
El caso conmocionó a la capital debido a que un video documentó los últimos momentos de Paola Buenrostro después de ser atacada a tiros y la detención del homicida, quien fue liberado a las pocas horas de ese 30 de septiembre de 2016.
Días después, sus compañeras protestaron con el cuerpo de Paola Buenrostro en su ataúd, a plena luz del día, en la avenida Insurgentes, una de las más emblemáticas de la capital.
“Hoy se llega al inicio de empezar a tener justicia, es un acto reparatorio después de tener que haber vivido todas las violencias estructurales por la procuración de justicia”, dijo Kenya Cuevas en entrevista con medios tras la aprobación de la reforma.