La población de mariposa monarca cae 59.3% en los bosques de México
La presencia de estos insectos durante el invierno 2023-2024 fue de 0.9 hectáreas en los bosques de Michoacán y el Estado de México. La cifra es la segunda menor desde 1993.
Los tapetes y tapices de mariposas monarca que cubren bosques en el Estado de México y Michoacán se redujeron a menos de la mitad durante el invierno 2023-2024 a causa del cambio climático, la degradación ambiental y el uso de herbicidas y plaguicidas en México, Estados Unidos y Canadá, según el estudio anual del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés).
Estos insectos migran desde el sur de Canadá y el norte y centro de Estados Unidos a sus sitios de hibernación en los bosques montañosos de Michoacán y el Estado de México. Una travesía de las más famosas en el mundo, debido a que estos pequeños seres alados viajan hasta más de 4 mil kilómetros para hibernar en tierras mexicanas.
Durante el invierno 2023-2024, la presencia de la mariposa monarca dentro de los bosques de México fue de 0.9 hectáreas, lo que representa una baja del 59.3% con respecto a la superficie de 2.21 hectáreas que se cubrieron de naranja y negro en la temporada 2022-2023, indica el reporte anual realizado por la organización con la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas de México (Conanp) y la Alianza WWF-Fundación Telcel TELMEX.
Un dato que da mayor perspectiva a la caída en la llegada de la especie Danaus plexippus es que la superficie registrada entre 2023-2024representa históricamente la segunda menor desde 1993, cuando se inició el monitoreo sistemático. Sólo mayor a las 0.67 hectáreas documentadas en 2013-2014, resaltó la Conanp.

En la reciente temporada se localizaron cinco colonias dentro de la Reserva de la Biosfera Mariposa Monarca (RBMM) que abarcaron 0.23 hectáreas y cuatro fuera de ella, de 0.62 hectáreas.
Las colonias más grandes se detectaron fuera de la RBMM: en el ejido San Antonio Albarranes, en el santuario Palomas, con 0.34 hectáreas, y en el ejido Ojo de Agua, Santuario de Peña Ahumada, con 0.21 hectáreas, ambas en el Estado de México.
Un dato alarmante es el del ejido El Rosario, en el santuario Sierra Campanario, Michoacán, donde se ubica tradicionalmente la colonia más grande. Ahí, las mariposas ocuparon una superficie de 0.19 hectáreas. Por segunda ocasión la colonia no fue la más ocupada.
Año con año, la llegada de las mariposas monarca atrae a turistas a los bosques, que han sufrido los embates del cambio climático y el uso de químicos.
“Los científicos creen que las variaciones climáticas en las zonas de reproducción de la monarca en Canadá y Estados Unidos provocaron altas temperaturas y sequías, que redujeron la abundancia de algodoncillo, la única planta en la que las mariposas ponen sus huevos. Los cambios en el uso de la tierra en Estados Unidos, combinados con el uso generalizado de herbicidas, también contribuyeron a la pérdida de algodoncillo y otras plantas de néctar esenciales para alimentar a las monarcas adultas”, resaltó el WWF.
Las mariposas monarca requieren de una masa forestal grande que las proteja de los vientos, la lluvia y las bajas temperaturas comunes durante las noches en estos bosques.
“Que haya menos monarcas hibernando en su hábitat forestal tradicional en México nos preocupa mucho a todos. Es fundamental que todas las comunidades, gobiernos, organizaciones no gubernamentales, científicos y otros continúen fortaleciendo nuestros esfuerzos de conservación y protección para apoyar la migración única de la monarca”. dijo Jorge Rickards, director general del WWF México, en palabras citadas en un comunicado de la organización.