La última carta de García Luna, a horas de su sentencia
El ex zar antidrogas Genaro García Luna fue encontrado culpable de narcotráfico. Tras múltiples prórrogas, mañana conocerá su sentencia
En una nueva carta escrita de su puño y letra, Genaro García Luna, el ex titular de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) durante el gobierno de Felipe Calderón (2006-2012) pidió clemencia al juez Brian Cogan, quien mañana dictará sentencia al ex mando policiaco por su colaboración con Cártel de Sinaloa.
La misiva, de cinco cuartillas, es el último intento de García Luna para convencer a Cogan de su inocencia, pese al veredicto de un jurado ciudadano lo encontró culpable de cinco cargos: conspiración para la distribución internacional de cocaína; conspiración para la distribución y posesión de cocaína; conspiración para importar cocaína; delincuencia organizada y dar declaraciones falsas en su solicitud de naturalización.
Cogan, el juez que sentenció a Joaquín Guzmán Loera a cadena perpetua, tiene en sus manos el futuro de Genaro García Luna: prisión de por vida al igual que al líder del Cártel de Sinaloa o una sentencia indulgente de 20 años, sugerida por el abogado César de Castro recientemente.
“Le solicito respetuosamente me permita regresar lo antes posible con mi familia y reincorporarme a la entrañable sociedad a la cual respeto y pertenezco”, le imploró García Luna en el escrito dirigido al juez “Cougan”, como erróneamente le llama.
Familia, carrera y adversarios
A lo largo del texto, García Luna habla sobre su rol familiar (dedica palabras a su esposa Linda Pereyra y a sus hijos: Genaro y Luna), además de las pérdidas que le significaron la pandemia de Covid-19, enfermedad que también contrajo durante su encierro en el Metropolitan Detention Center (MCD), Brooklyn.
Su madre murió antes de su detención, dos hermanos murieron por Covid-19 y dos hermanas más fueron detenidas por la Fiscalía General de la República (FGR) por el presunto desvío de recursos públicos para sus empresas de seguridad privada.

El otrora funcionario hizo una relatoría de su carrera policiaca y de la vigilancia a la cual estuvo sometido por la colaboración con agencias de Estados Unidos: “Impensable tener ese nivel de responsabilidad y al mismo tiempo tener contacto o vínculos criminales por lucro”, se excusó.
Identificado como “depositario de información clasificada como secreta y de seguridad nacional entre México y EUA”, García Luna mencionó sus galardones y reconocimientos como brazo derecho de Felipe Calderón, en la estrategia que desplegó en esos años, los primeros de una escalada de violencia que el actual gobierno no ha podido revertir.
Hacia el final del escrito, García Luna no desperdició la oportunidad de insistir en “el desmantelamiento del Poder Judicial”, aprovechando la coyuntura política en México en la que la mayoría del partido Morena (fundado por el expresidente Andrés Manuel López Obrador, némesis de Calderón) aprobó el voto popular de jueces y magistrados.
En una carta previa, García Luna acusó a AMLO de tener vínculos con el crimen organizado y afirmó que las pruebas existen en procesos penales abiertos en la Corte Este de Distrito de Nueva York, la misma que lo juzgó y que mañana sellará su destino.