México no destina el dinero suficiente para salud mental
Un reporte del CIEP exhibe que apenas se destina 1% del presupuesto total para salud mental, la OMS recomienda un 5%
En México, los recursos que el gobierno destina para la atención de la salud mental siguen siendo insuficientes: del presupuesto total de salud, apenas el 1% se destina a atender esta problemática. Esto de acuerdo a un análisis del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) publicado en el marco del Día Mundial de la Salud Mental.
El análisis señala que, pese a los esfuerzos del gobierno, el presupuesto que debería destinarse en países con ingresos medios como México es de 5% del presupuesto total, como lo recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS), un porcentaje del cual México aún está lejos.
De acuerdo con datos del INEGI (Encuesta Nacional sobre Salud y Envejecimiento 2021), el 26% de la población de una muestra representativa indicó síntomas de depresión durante la pandemia de Covid-19, mientras que en la Encuesta Nacional de Bienestar Autorreportado 2021, un 19% de la población encuestada reportó ansiedad en índices severos.
El gobierno de México tendría que triplicar su gasto en salud mental para cumplir con los estándares de la región, apunta el análisis del CIEP donde se precisa que en 2024 se destinaron apenas 3 mil 819.4 millones de pesos del Presupuesto de Egresos; con 9 mil 988 millones de pesos México podría cumplir con la cifra mínima.
Desde 2016, el gasto en salud mental se ha mantenido por encima de los 3 mil millones de pesos, registrando subidas y bajadas, pero sin salirse del umbral.

Además, pese a que la OMS recomienda un psiquiatra por cada 10 mil habitantes, el país cuenta apenas con 0.36 psiquiatras por 10 mil habitantes, un déficit que provoca sobrecarga y saturación para atender a los pacientes.
El Proyecto de Nación de la presidenta Claudia Sheinbaum contiene cinco referencias generales a la salud mental, una de sus promesas de campaña fue la implementación de un Programa Nacional de Salud Mental dirigido a jóvenes, a personas de la tercera edad y a personas víctimas de violencia.
“Aumentar el presupuesto en salud mental no es solo una urgencia para cerrar la brecha de atención, sino también es una inversión estratégica. A través de un enfoque preventivo y una red de servicios comunitarios, el país puede evitar los elevados costos económicos y sociales que acompañan a los trastornos mentales si no se tratan a tiempo”, concluye el CIEP.