Otra vez Nuevo Laredo: militares matan a una enfermera, una niña y un joven
Los asesinatos extrajudiciales de militares contra civiles desarmados continúan en Nuevo Laredo, Tamaulipas
Durante el fin de semana se dio a conocer que militares de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y de la Guardia Nacional asesinaron a tres civiles en supuestas persecuciones en Nuevo Laredo, Tamaulipas. Un estado con presencia del crimen organizado, en el que las ejecuciones extrajudiciales por parte del Ejército son una constante.
El viernes por la noche, la enfermera Yurice Rivera circulaba a bordo de un vehículo con su hijo menor de edad y su esposo, cuando un vehículo del Ejército en una presunta persecución disparó en la cabeza a la trabajadora de salud.
De acuerdo con el medio local, Justicia Gráfica, la enfermera del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) murió instantáneamente y según el relato de su esposo, pidió auxilio a los militares, quienes enfurecidos huyeron de la escena.

Al día siguiente, sábado a las 7 de la noche, una patrulla de la Guardia Nacional embistió por detrás a un vehículo en que viajaban la señora Lidia Galván y su nieta Iris, de ocho años, los militares dispararon contra el vehículo alcanzando a la menor en la cabeza.
Aunque en un inicio los militares se negaron a apoyar a las víctimas, al percatarse de la situación, trasladaron a la niña al hospital, aunque Iris murió a causa de la herida, relató su abuela.
Después, el domingo 13 por la mañana, el joven Diego Alfredo, de 18 años, quedó al interior de una camioneta perseguida presuntamente por militares. El cuerpo del joven presentó indicios de tortura y posiblemente había sido secuestrado, indicó el Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo.

Nuevo Laredo y la frecuente violencia de militares
Nuevo Laredo es una de las ciudades con mayores incidentes de ejecuciones extrajudiciales, tal como lo han alertado organizaciones dedicadas a la defensa de derechos humanos y coberturas periodísticas. A Raymundo Ramos, defensor de derechos humanos, el Ejército lo ha espiado con el malware Pegasus, de acuerdo con un reporte del Centro Militar de Inteligencia localizado en la filtración de datos Guacamaya.
De acuerdo con el Sistema Nacional de Alerta de Violaciones a los Derechos Humanos de la CNDH, en Tamaulipas se han emitido a la Sedena cuatro recomendaciones ordinarias y cuatro por violaciones graves: varias de ellas acreditan los abusos militares en Nuevo Laredo.
Incidentes como el asesinato de Armando Hernández (estudiante de 16 años), el de la niña Heidi Pérez (de cuatro años), el de Damián Genovés Tercero (18 años) o la masacre contra cinco civiles muestran que la constante en estos hechos de violencia es el uso de la fuerza letal contra civiles y personas ajenas a los enfrentamientos.
