Paro judicial: la parálisis mientras se discute la reforma al Poder Judicial
El paro en el Poder Judicial ha movilizado a miles de trabajadores y personas juzgadoras, previo a la votación del dictamen de la reforma.
Mientras se discute el dictamen de reforma al Poder Judicial de la Federación (PJF), impulsado por el partido del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), miles de jueces y trabajadores de este poder se mantienen en paro como protesta a la posible aprobación del dictamen.
Desde la semana pasada, trabajadores del PJF aglutinados en seis organizaciones, así como jueces federales comenzaron un paro de labores y protestas con tal de presionar a los legisladores del oficialismo, mientras hacen un llamado a la sociedad por las repercusiones de la reforma constitucional.
El dictamen que se discute y que ha circulado en medios, propone principalmente la elección de ministros, jueces y magistrados por voto popular, una decisión que los integrantes del PJF en paro consideran riesgosa, por los efectos que tendría en la independencia judicial.
Y aunque el diputado morenista Ignacio Mier afirmó que se habían hecho más de 100 cambios al proyecto inicialmente propuesto por el presidente López Obrador (considerando los foros de diálogo de la reforma), las modificaciones no fueron suficientes para calmar las preocupaciones de los empleados y juzgadores.

La parálisis del Poder Judicial
Desde esta mañana, manifestantes acudieron al Palacio Legislativo de San Lázaro para protestar por el dictamen que hoy se discute y vota en la Comisión de Puntos Constitucionales.
La Asociación Nacional de Magistrados de Circuito y Jueces de Distrito del Poder Judicial de la Federación (JUFED), que desde el miércoles decidió el paro de labores de personas juzgadoras, presentó un oficio tratando de llamar al diálogo a la Comisión.
La presidenta de la JUFED, Juana Fuentes, ha mandado un mensaje al grupo de diputados del oficialismo: “Que entiendan bien esos legisladores que están por regresar a nuestro México a su época más oscura (…) la suspensión de labores que mantenemos trabajadores y juzgadores no es un acto de rebeldía, es un acto de responsabilidad”.
Se estima que 55 mil trabajadores del sector rechazan la reforma, mientras que mil 202 jueces participan en el paro judicial. Marchas convocadas por este grupo de trabajadores se han realizado en Ciudad de México, así como en Michoacán, Puebla, Nuevo León, Jalisco, Oaxaca, Veracruz y otros estados.
El paro judicial ha detenido asuntos en 20 de los 32 estados del país.
Reacciones del mercado y desde el extranjero
Ante la inminente aprobación de la reforma y la validación del Instituto Nacional Electoral (INE) de la mayoría calificada para Morena en la Cámara de Diputados, las reacciones desde el extranjero han puesto en entredicho la reforma.
Por ejemplo, las declaraciones de Ken Salazar, el embajador de Estados Unidos en México quien señaló que la reforma pondría en riesgo la democracia mexicana y las relaciones comerciales con el país vecino. Al poco tiempo, el embajador de Canadá, Graeme C. Clark, se unió a las críticas por los “impactos en las relaciones bilaterales”.
Bancos estadunidenses también han puesto el dedo sobre las implicaciones de la reforma judicial en materia de inversiones: la semana pasada el banco Morgan Stanley degradó la recomendación para invertir en empresas de México.
López Obrador ha respondido con dureza a las críticas de los embajadores, acusando injerencismo y “falta de respeto” a la soberanía. Los intercambios de respuestas sólo han tensado las relaciones tanto para el gobierno saliente de AMLO, como para el equipo de la presidenta electa Claudia Sheinbaum.