Restos de Silverio Villegas regresan a México tras ser asesinado por ICE en Chicago
La Secretaría de Relaciones Exteriores exige una investigación rigurosa del caso. Las autoridades de Michoacán contradicen la versión inicial de las autoridades estadounidenses y anuncian apoyo legal para la familia.
Los restos de Silverio Villegas González, migrante mexicano de 23 años originario de Irimbo, Michoacán, arribaron este jueves a su tierra natal para ser sepultados, tras ser asesinado durante un operativo del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) el pasado 12 de septiembre en un suburbio de Chicago, Illinois.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) informó que el Consulado General de México en Chicago asistió a la familia Villegas durante el proceso de repatriación, incluyendo las gestiones realizadas en Illinois y el pago de los gastos correspondientes. El cuerpo fue recibido en Irimbo, ubicado en la región oriente de Michoacán, entre Maravatío y Angangueo, donde será velado y sepultado este viernes al mediodía, según confirmó el secretario de Migración del estado, Antonio Soto.
El hecho, que ha generado condena y reclamos de justicia por parte de activistas y gobiernos estatales y federales, se encuentra en el centro de una controversia entre las versiones de las autoridades estadounidenses y las mexicanas.
Los hechos en disputa
Según el comunicado oficial emitido por el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos, la muerte de Silverio Villegas ocurrió mientras agentes del ICE realizaban un operativo. Al indicarle a Silverio, quien se encontraba sin documentos, que se detuviera, este intentó huir en el vehículo que conducía.

Foto: Juan José Estrada, Cuartoscuro
La versión estadounidense señala que, durante la maniobra, Villegas González arrastró a uno de los oficiales con el automóvil “a una distancia considerable”. El parte oficial indica que el agente, “temiendo por su vida, disparó su arma”, lo que ocasionó la muerte del migrante.
Sin embargo, esta narrativa es rechazada por las autoridades michoacanas. Antonio Soto, secretario de Migración del estado, afirmó en declaraciones recogidas por medios locales que “hay pruebas de que Silverio no arrastró al agente de seguridad como se mencionó al inicio, y hay videos que lo demuestran”.
Soto añadió que el gobierno de Michoacán estará al pendiente de la demanda que se presente contra la policía federal de Estados Unidos a través de un despacho privado y continuará apoyando a la familia.
La respuesta institucional mexicana
La Cancillería mexicana, a cargo del canciller Juan Ramón de la Fuente, condenó el asesinato el pasado 13 de septiembre y, a través de su Consulado en Chicago, solicitó “una investigación rigurosa por parte de la autoridad correspondiente para el pleno esclarecimiento de los hechos”.
Posteriormente, la Jefatura de la Unidad para América del Norte de la SRE entregó una nota diplomática a la embajada de Estados Unidos en México en la que transmitió la condena a la violencia y exigió una investigación exhaustiva.

Foto: Juan José Estrada, Cuartoscuro
Por su parte, el gobierno de Michoacán se ha coordinado con la familia para el traslado del cuerpo. Soto relató que en días pasados acudió a Chicago, donde se comunicó con los padres y un hermano de Silverio. “Estaremos al pendiente del caso”, aseguró el funcionario estatal.
El Congreso local de Michoacán también se sumó a las protestas. Durante una sesión celebrada este 25 de septiembre, condenó los hechos y exigió a las autoridades estadounidenses que no se permita que el homicidio quede en la impunidad. Los legisladores subrayaron que los migrantes mexicanos “son gente de bien que emigra al país del norte por necesidad laboral, y no está bien que se les trate como criminales”.
El duelo y los próximos pasos
El cuerpo de Silverio Villegas fue trasladado desde el aeropuerto de Guadalajara hasta Morelia, y de ahí a la localidad de Loma de Chupio, en Irimbo, para su velorio y sepultura.

La SRE reiteró que el Consulado “continuará brindando toda la protección consular que requiera la familia Villegas” y que la red consular mexicana permanece atenta para asistir a todas las personas en procesos de deportación y a sus familias.
El caso de Silverio Villegas González se enmarca en un contexto de tensiones recurrentes sobre el uso de la fuerza por parte de agentes migratorios estadounidenses. Mientras su familia y su comunidad lo despiden, las autoridades mexicanas esperan una respuesta formal de Estados Unidos que aclare las circunstancias de su muerte.