“Toman, transan, agandallan y lo llaman mérito”, informe de Oxfam sobre ultrarricos y desigualdad
Un saqueo de recursos y territorios ocasionado por oligarquías interrelacionadas, señala un reporte de Oxfam México.
Entre 2018 y 2025, el número de ultrarricos en México pasó 10 a 22, la mayoría de nuevos multimillonarios han heredado el dinero sus dinastías, favorecidas por la ausencia de impuestos a las grandes fortunas, describe el informe Beneficios en fuga. Ganancias para unos pocos y pérdidas para el resto, publicado por Oxfam México.
La permanencia de más multimillonarios, igual de ricos que en sexenios anteriores, da pie a los hallazgos de Oxfam sobre acumulación y despojo. Para la organización la historia económica de México se explica en un patrón de conductas en las élites: “toman, transan, agandallan… y lo llaman mérito”.

Desde el despojo que data desde el siglo XIX del henequén en Yucatán, en el siglo XX con los litorales acaparados por la industria turística y hasta nuestros días, con el aguacate de Michoacán en la mira de las industrias y del crimen organizado, la historia exhibe ese patrón constante de saqueo.
“Es injusto y abusivo porque genera oligarquías interrelacionadas: los bancos especulan con el agua, el turismo acapara el agua de las comunidades y las tierras de los ejidos y los sitios turísticos más conocidos fueron impulsados por banqueros en busca de divisas. No son despojos aislados: se necesitan el uno al otro para subsistir”, apunta Oxfam.
Bancos
En México más de la mitad de las ganancias de la banca proviene de las abusivas comisiones e intereses que le cobran a sus clientes, ese márgen de ingresos se triplicó entre 2000 y 2023, según datos de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
Oxfam atribuye el modelo rapaz de los bancos a las medidas privatizadoras del sexenio neoliberal de Carlos Salinas de Gortari, que abrió la puerta a la falta de regulación y a la crisis de endeudamiento que derivó en el Fondo Bancario para la Protección del Ahorro (Fobaproa), una deuda privada que sigue pagándose como pública.

El reporte señala también las ganancias crecientes en cada sexenio por utilidades después de impuestos. El 75% del mercado bancario, acaparado por cinco instituciones bancarias transfirieron la mitad de sus ganancias a matrices en España y Estados Unidos.
Agua
Los bancos al igual que otras empresas estatales y privadas poseen concesiones de agua. Datos de Conagua muestran que el agua que estos organismos extraen en Jalisco para uso agrícola alcanzaría para que una persona pueda usarla durante 18 millones de años, 12 millones en el caso de Campeche y 10 millones en Sinaloa.
El agua extraída por algunos concesionarios suele usarse para servicios, algunos de sus explotadores son hoteles, constructoras y organismos públicos, otras entidades como CFE Generación IV han extraído volúmenes de agua equivalentes a surtir del servicio de agua a la alcaldía Iztapalapa durante 15 años y medio.

El acaparamiento del agua provoca además impactos y desigualdades para las mujeres, pues ellas asumen regularmente tareas de cuidados frente a enfermedades y acarreo de agua.
Turismo
La industria turística ha acaparado espacios mediante la expulsión silenciosa al subir los costos de vida, ejemplo de ello son los alquileres por aplicación, que en la Ciudad de México y en los Pueblos Mágicos han desplazado a sus habitantes.
Oxfam insiste también en la privatización de las playas mexicanas que, con ser cliente de un hotel de lujo, se permite el acceso al mar en contraste con las pocas playas públicas.
Además, la dinámica impacta directamente en la convivencia de las comunidades, en la contaminación ambiental, en el derecho al agua (al ser hoteles explotadores del agua) y en las brechas salariales en el la industria hotelera