Más de 80 organizaciones y activistas piden al gobierno frenar la violencia en Chiapas
Más de 80 activistas y colectivos exigieron a los gobiernos frenar la violencia que ha provocado desplazamientos y poblaciones incomunicadas en Chiapas desde mediados del mes pasado, a causa de la disputas entre el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el Cártel de Sinaloa.
Los defensores de derechos humanos, agrupados en el Colectivo de Monitoreo Frontera Sur, resaltaron que los municipios y ejidos cercanos a Frontera Comalapa, Chicomuselo, La Concordia, El Porvenir, Motozintla, Bejucal de Ocampo, Bella Vista, Siltepec, Mazapa de Madero, Amatenango de la Frontera, Monte Cristo de Guerrero, Angel Albino Corzo (Jaltenango), La Grandeza, Niquivil, Pablo L. Sidar y Las Chicharras son las zonas más afectadas y se encuentran incomunicadas por los bloqueos carreteros realizados por los grupos del crimen organizado.
Tan solo este miércoles se reportó que alrededor de 400 personas dejaron la comunidad de Nuevo Reforma, en el municipio de Chicomuselo, a causa de los enfrentamientos y un ataque con un dron cargado de explosivos.
“La población de estos municipios está en total desprotección y abandono de parte de las autoridades estatales y federales, además está siendo obligada por los grupos criminales a participar en los bloqueos, utilizándoles como barricadas humanas por si viene el grupo rival o para impedir el paso de fuerzas federales”, indicaron en un posicionamiento conjunto.

El colectivo reclamó al presidente Andrés Manuel López Obrador por minimizar la situación y acusar a los pobladores de colaborar con los grupos criminales.
El pasado viernes 26 de julio, López Obrador descartó que el desplazamiento forzado de cientos de personas a Guatemala por la violencia en Chiapas sea una muestra de fallas en la estrategia de seguridad federal.
“Son circunstancias. México es un país muy grande, somos más de 130 millones de mexicanos. Hay, como en todas partes, conflictos, pero no es asunto como lo quieren ver nuestros adversarios, de que haya ingobernabilidad, que predomine la violencia, que sea un caos, que se esté destruyendo el país”, dijo el presidente en su conferencia de prensa mañanera.
Además, López Obrador llamó a los pobladores a “que no se conviertan en base social” de los grupos de la delincuencia organizada.
“Estas afirmaciones, por una parte desconocen la imposibilidad que enfrentan las personas ante la amenaza de los violentos y el uso de las armas; y por otra, violan el principio de distinción del Derecho Internacional Humanitario (DIH) y generan mayor riesgo para la población de ser identificada por uno u otro grupo como aliada de grupos contrarios, convirtiéndoles en objetivo militar”, reclamaron los activistas y colectivos.