8M: Más de 100 mil embarazos de niñas y adolescentes en México
En 2023, 101 mil niñas y mujeres adolescentes registraron embarazos de los 10 a los 17 años, según cifras del Inegi.
Los embarazos en niñas y adolescentes registran cifras que se cuentan por miles desde hace 25 años, de acuerdo con datos de los censos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Tan solo en 2023 -el último año del que se tienen datos certeros- más de 101 mil niñas y adolescentes de 10 a 17 años registraron embarazos en el país.
La Estadística de Nacimientos Registrados en 2023 del INEGI, arroja datos sobre la edad de niñas y adolescentes que, en la mayoría de casos, son forzadas a la maternidad, viendo interrumpidos sus proyectos de vida.
En el rango de 10 a 14 años, el INEGI registró 6 mil 798 embarazos, mientras que 94 mil 349 se registran en el rango de los 15 a los 17 años. La mayor cantidad de nacimientos se registraron en el Estado de México, Chiapas y Puebla.
Por otro lado, los datos recopilados por la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM) muestran que, a partir de 2000 y cada cinco años (periodo en que se realizan los censos del INEGI), se han registrado miles de embarazos en niñas y adolescentes, alcanzando un pico máximo de 212 mil 155 en el censo de 2010.
Es importante poner en relieve los datos aportados por la Secretaría de Salud en 2023 que exhiben la violencia sexual contra niñas y mujeres adolescentes. Revelando 9 mil 45 víctimas en ese año en edades de los 1 hasta los 17 años, siendo los agresores parejas (en caso de las adolescentes), parientes, padrastros o hasta personas conocidas sin parentesco, mismos que han cometido los crímenes en viviendas, en la escuela, vía pública, autos particulares y en el transporte.
20% de estos casos de agresión sexual en 2023 derivaron en embarazos no deseados.
La REDIM señala que estas cifras son apenas una parte de un universo más grande, pues sólo corresponden a los datos recabados por la Secretaría de Salud y que se hacen públicos. En muchos casos, las niñas y adolescentes no denuncian por amenazas de parte del agresor.