Rodeado de escándalos, Gerardo Fernández Noroña pide licencia para ir a Palestina
Debido a un viaje a Palestina, Noroña, el expresidente del Senado pidió licencia temporal para dejar su escaño.
Tras ser exhibido viajando en jet privado y por la millonaria casa adquirida en Tepoztlán, Morelos, el morenista Gerardo Fernández Noroña anunció que pedirá licencia para separarse del cargo y dejar en suplencia a la senadora Dunia Ludlow Deloya.
Esta mañana expuso en conferencia de prensa que el motivo de su ausencia será para viajar a Palestina, un viaje al que fue invitado por Emiratos Árabes Unidos, pero que había estado postergando durante meses.
El senador estará de licencia para viajar mañana y volver el 2 de noviembre. Sostuvo que pidió licencia debido a la “observación absoluta” sobre sus actividades legislativas y denunció las constantes faltas al acuerdo de cese al fuego por parte de Israel.
Noroña, quien presidió la Cámara de Senadores de septiembre de 2024 a agosto de 2025, se convirtió pronto en una de las figuras más polémicas del morenismo, cuyos principios como partido plantean una estricta política de austeridad, la cual ha sido desconocida abiertamente por el político y otros de sus correligionarios.
En los últimos años, Noroña pasó de ser un aspirante a la presidencia de la República con sólido respaldo entre simpatizantes (superando en la encuesta interna de 2023 a Adán Augusto López Hernández) a un ejemplo de las contradicciones al interior del partido.

Durante su presidencia en la también llamada Cámara Alta, se vio envuelto en escándalos como la compra de su suntuosa casa de 12 millones de pesos, justificó la afiliación del panista Miguel Ángel Yunes Márquez y protagonizó una álgida discusión con Alejandro “Alito” Moreno, el líder del Partido Revolucionario Institucional (PRI), que derivó en una agresión física contra uno de los asesores de Noroña.
En situaciones como la grave crisis de desapariciones forzadas en el país, Noroña ha desestimado los reclamos de estudiantes que lo cuestionaron por el caso Teuchitlán, mientras que se sumó al rechazo al procedimiento abierto por el Comité contra la Desaparición Forzada de las Naciones Unidas (CED-ONU). Esta clase de desplantes le han valido críticas desde sectores que no pertenecen precisamente a la oposición partidista.