Identifican a víctimas en el rancho de exterminio en Teuchitlán, Jalisco
Fotografías, ropa y credenciales han servido para identificar algunas de las posibles víctimas que pasaron por el rancho de exterminio del Cártel Jalisco Nueva Generación.
Luego de que el colectivo Guerreras Buscadoras de Jalisco encontrara alrededor 400 pares de zapatos, mochilas, maletas, montones de playeras, blusas, cinturones, sandalias, carteras, además de identificaciones, cartas, fotografías en el Rancho Izaguirre en Teuchitlán, Jalisco, algunos elementos han servido para identificar a familiares que probablemente estuvieron en el lugar que –de acuerdo a las evidencias y testimonios– funcionó durante al menos tres años como punto de entrenamiento y exterminio del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
A través de las fotos difundidas en redes sociales, por ejemplo, fue identificada una joven que estuvo en el rancho en donde, además, fueron encontrados tres hornos crematorios.

“Ya te encuentras descansando en paz, mi china. Tu familia y amigos jamás dejaron de buscarte”.
El texto publicado por la usuaria Myriam Hernández en Facebook menciona que la joven que aparece en la fotografía de un relicario era, además, madre de un niño: “Fuiste una buena madre buscando un mejor futuro para tu hijo, siempre te recordaremos como una guerrera. Tu hijo se queda en buenas manos. Siempre te recordaremos como una mujer fuerte, no sabemos cuánto sufriste, pero al menos sabemos que ya descansas en paz. Te amamos, Chinita. No es un adiós, sino un hasta pronto. Dios te tenga en su Santa Gloria”.
Fue el pasado miércoles, 5 de marzo, que 40 madres buscadoras del colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco ingresaron al Rancho Izaguirre, en Teuchitlán. Habían recibido una llamada anónima de un joven que, según les relató, fue levantado hace tres años y llevado a ese lugar en contra de su voluntad. Permaneció allí poco más de un mes hasta que logró escapar.
De acuerdo a Índira Navarro, integrante de Guerreros Buscadores de Jalisco, este informante anónimo relató que en este rancho se llevaban a cabo salvajes labores de adiestramiento. En apenas un mes, este testigo habría visto a cientos de personas, sobre todo jóvenes de entre 20 y 25 años, pasar por aquí. El Rancho era llamado el Kínder y allí los criminales obligaban a los reclutados a pelear entre sí hasta la muerte, los castigaban amarrándoles durante días enteros o los asesinaban si no superaban ciertas pruebas o se resistían. Si acaso lograban sobrevivir, los enviaban a misiones especiales como sicarios: “carne de cañón”, define Navarro.

Foto: FB Guerreros Buscadores de Jalisco
Además, los obligaban a cavar pozos por todo el rancho donde enterraba a las personas que morían o eran asesinadas. En el lugar encontraron también figuras de la Santa Muerte, santería y otros cultos; había libretas con listas de apodos y número de reclutados, libros, llaves, medicamentos, cartas de despedida y otros elementos que han servido para identificar a algunas de las posibles víctimas.
El pasado viernes, por ejemplo, comenzó a circular en los medios de comunicación un mensaje que Eduardo Lerma Nito, de 20 años, dejó escrito en una libreta encontrada en el rancho. Lerma es originario de Guanajuato, desapareció hace un año, el 26 de febrero de 2024, en San Juan de los Lagos Jalisco.
“Mi amor si algún día ya no regreso solo te pido que recuerdes lo mucho que te amo y digas: se me fue mi enojón berrinchón y celoso. J.G.L .Eduardo Lerma Nito 02 mayo 2003 Cortázar, Guanajuato”.
Eduardo es uno de los casos que fue encontrado con vida, varios meses después.

Eduardo Lerma ya está con su familia.


Por este tipo de hallazgos es que todas las prendas, zapatos, maletas y otros artículos encontrados en el rancho de Teuchitlán quedarán a disposición de la Fiscalía especializada en Personas Desaparecidas, mientras los peritos en Ciencias Forenses crearán un álbum fotográfico para crear un álbum de acceso público que pueda consultar cualquier persona con un familiar desaparecido.
Otra de las identificaciones localizadas está a nombre de Edgar Fabián Solís Santamaría, con domicilio en el Fraccionamiento Chulavista, en el municipio de Tlajomulco de Zúñiga.
A la fecha, agentes de la Fiscalía del Estado y peritos del Instituto de Ciencias Forenses continúan laborando en la búsqueda y extracción de restos humanos. MIentras tanto, las madres buscadoras han emitido una alerta a los jóvenes de Jalisco y de México puesto que se ha detectado que los grupos delictivos utilizan anuncios por internet, por medio de los cuales ofrecen pagos de 4 mil o 5 mil pesos a la semana, sin experiencia previa, para reclutar jóvenes sin mencionarles que se convertirán en prisioneros del cártel y que serán asesinados si no cumplen con las expectativas.
“No es verdad todo lo que te dicen, no es verdad todo lo que te prometen, al llegar a ese lugar te quitan todas tus pertenencias, ilusiones y le perteneces prácticamente a ellos; ellos deciden si vives”, se lee en el comunicado compartido a través de las redes sociales de Guerreros Buscadores de Jalisco.







“Depende si le eres de utilidad como carne de cañón, a ellos no les importa sólo eres un número más. Así es como termina gran parte de los jóvenes reclutados que al principio llevan por una emoción de querer ganar o querer sentirse superior trayendo un arma. Pero mira: la mayoría están dentro de esos crematorios, huesos calcinados. Esto que te digo es duro, pero es la realidad que vivimos en Jalisco”.
Fueron 40 las madres buscadoras que entraron el pasado miércoles al Rancho Izaguirre. Muchas de ellas no pudieron contener el llanto al ver las montañas de zapatos y ropa apilada en un rincón, los hornos crematorios todavía con restos de huesos dentro. Sobre todo no pudieron creer que, hace 6 meses, la Fiscalía Estatal en compañía de la Guardia Nacional, hiciera un operativo en ese lugar y que ninguna autoridad lograra ver lo que ellas entendieron en poco tiempo: que ese lugar era un campo de exterminio, una mina de cadáveres, de ropa de personas desaparecidas, un lugar sembrado de casquillos, armas y más.
Ante el escándalo, la Fiscalía General de la República revisa si puede atraer el caso. Así lo advirtió la presidenta Claudia Sheinbaum en su conferencia de esta mañana. “Obviamente es terrible”, dijo.
“¿Qué corresponde al Gabinete de Seguridad, a las fiscalías, en su momento a los tribunales o al Poder Judicial? pues investigar y ver, en particular, en este caso que ya se había hecho entiendo un primer… no sé si fue cateo o exactamente la fiscalía estatal, porque después no resguardaron el lugar, pues hay que hacer una investigación de qué fue lo que pasó”, dijo.
Actualmente, la Fiscal Especial en Personas Desaparecidas, Blanca Jaqueline Trujillo Cuevas, encabeza las investigaciones sobre el rancho Izaguirre, en Teuchitlán, estado de Jalisco.